Radiofrecuencia bipolar tripolar facial y corporal

Radiofrecuencia multipolar facial y corporal que, como su nombre indica, las ondas electromagnéticas son aquellas que son capaces de viajar a través del vacío, a diferencia de las ondas mecánicas que necesitan un medio material para poder hacerlo.

El efecto térmico interno producido sobre los tejidos se basa en la diatermia, ésta genera un calor profundo que estimula la regeneración del colágeno y la elastina.

Indicaciones:

• Facial:
  • Atenúa líneas de expresión.
  • Efecto oxigenante.
  • Mejora sobre la textura, color y elasticidad cutánea.
  • Síntesis de nuevo colágeno.
  • Efecto lifting.
  • Ayuda a disolver las grasas acumuladas.
• Corporal:
  • Mejora la textura, color y elasticidad cutánea.
  • Ayuda a disolver las grasas acumuladas.
  • Disminuye la piel de naranja.
  • Reafirmación de los tejidos.
  • Síntesis de nuevo colágeno.

Características técnicas:

• Fuente de alimentación: 220 / 50 Hz
• Potencia: 50W
• Frecuencia de trabajo: 1 MHz
• Tratamiento facial: bipolar con 5 intensidades.
• Tratamiento corporal: tripolar con 10 intensidades.
• Medidas generales: 27 x 27 x 14 cm (37 cm de largo incluyendo soporte manípulos)
• Peso: 5 kg

Descripción de los pasos:

1. Limpiar la zona a tratar: aplicar una buena cantidad de leche limpiadora en la cara mediante un suave masaje.
2. Con la ayuda de un algodón, retirar la leche limpiadora y los restos de maquillaje/suciedad hasta que la piel quede bien limpia y lista para el tratamiento.
3. Aplicar un fina capa de glicerina líquida o gel conductor en la superficie de la cara y el cuello. Para esta aplicación nos podemos ayudar de un pincel suave.
4. Conecte el equipo y programe los parámetros para el tratamiento de radiofrecuencia facial (consultar manual de usuario).
5. Con el manípulo facial, dar una primera ronda general de pasadas por toda la cara, siempre en sentido ascendente y desde el interior del rostro hacia el exterior. Pasar el manípulo en este sentido por ambos lados de la cara.
6. Después de una primera pasada general, hay que enfatizar las zonas más "problemáticas" del rostro: empezar dando varias pasadas en la zona de las arrugas nasogenianas.
7. Incidir también en la zona del ovalo facial, en sentido ascendente y de dentro hacia fuera.
8. Tratar el contorno de los ojos levantando el manípulo hasta el arco de las cejas.
9. Repasar la zona de las "patas de gallo" si se considera necesario.
10. Por último, dar varias pasadas en la zona de las arrugas de la frente y el entrecejo.