Sillones dentales

Los sillones dentales tienen como principal misión permitir que el dentista realice su trabajo lo mejor posible, a la vez que proporcionan la máxima comodidad al paciente. Por eso cuentan con un diseño anatómico y varias piezas articuladas articuladas (cabezal, asiento, respaldo, reposabrazos y reposapiés). 

¿Qué partes tiene un sillón dental?

Las unidades dentales están compuestas por el asiento, que debe ser regulable en altura para facilitar tanto la entrada y salida del paciente, como el trabajo del dentista. Pueden tener uno o dos reposabrazos. El tapizado debe ser antideslizante, impermeable y de fácil limpieza y desinfección.

Incluyen también una lámpara dental de luz fría con asas, para poder orientarla hacia el área en la que se realiza la exploración o tratamiento. Así como una bandeja porta instrumental, unida al sillón dental por un brazo articulado. Ésta suele incluir, además, una jeringa triple, las mangueras para los elementos rotatorios (en formato colibrí o enroscadas), la lámpara de polimerización, un aspirador y el panel de mandos.

Los sillones dentales llevan incorporada una escupidera para que el paciente se enjuague la boca, que consta de pila, aspirador y dispensador de agua.

El equipo dental lo completan un negatoscopio para la visualización de radiografías intrabucales, un pedal con el que controlar los movimientos del sillón y un taburete para el dentista con regulación de altura y apoyo de columna, para mantener las curvaturas fisiológicas.

Nuestros sillones para dentistas han pasado los más estrictos controles de calidad y disponen de todas las certificaciones necesarias para su comercialización. En Quirumed podrás comprar el sillón dental que mejor se adapte a tus necesidades y a las de tu clínica.