Silla magnética Tremi-Rf para la rehabilitación del suelo pélvico

Descripción El Sillón Magnético TREMI-RF (Terapia de Radiofrecuencia y Pulso Magnético) es una herramienta no invasiva para la Rehabilitación del Suelo Pélvico que utiliza la tecnología más avanzada de vibración magnética focalizada de alta intensidad combinada con Radiofrecuencia. El sillón magnético crea un campo magnético alrededor de los músculos del suelo pélvico, tanto en hombres como en mujeres, y provoca contracciones y relajación de los músculos perineales superficiales y profundos hasta 10 cm de forma controlada y modulada. La Radiofrecuencia puede combinarse con el tratamiento magnético en modo manual. Las funciones del suelo pélvico se mejoran así con sesiones cómodas de media hora de duración, sin esfuerzo, sin dolor y sin invadir las zonas íntimas con sondas (se puede utilizar con ropa). Modos AUTOMÁTICO y MANUAL: en modo manual, se activa el sillón magnético. Dispone de 5 programas AUTOMÁTICOS. En modo MANUAL, también está disponible la radiofrecuencia.

Indicaciones:

Con el sillón electromagnético TREMI es posible tratar todas las disfunciones del suelo pélvico:

• Anorgasmia
• Cistitis intersticial
• Disfunción eréctil
• Dispareunia
• Trastornos sexuales
• Dolor por prostatitis
• Dolor pélvico crónico
• Eyaculación precoz
• Hemorroides
• Fibromialgia
• Incontinencia fecal
• Incontinencia urinaria femenina (de esfuerzo, de urgencia, mixta)
• Incontinencia urinaria masculina
• Hepática Neuralgia
• Neuropatías pélvicas
• Posparto
• Prolapso genital de primer y segundo grado
• Estreñimiento
• Vaginismo
• Vejiga hiperactiva
• Vulvodinia

TREMI-RF también se puede utilizar, con la adición de accesorios opcionales, para el tratamiento de la grasa y la tonificación muscular.

El dispositivo puede incluir opcionalmente un accesorio para el abdomen y otro para brazos y piernas.

El EMS se basa en un aplicador que emite energías de RF y EMS. Gracias al calentamiento por radiofrecuencia, la temperatura muscular aumenta rápidamente varios grados. Esto prepara los músculos para la exposición al estrés, de forma similar a lo que ocurre con un calentamiento antes de cualquier otra actividad física. En menos de 4 minutos, la temperatura de la grasa subcutánea alcanza niveles que provocan apoptosis, lo que significa que las células grasas sufren daño permanente y se eliminan lentamente del cuerpo. Estudios clínicos han demostrado una reducción promedio del 30 % en la grasa subcutánea.

Al superar las limitaciones del cerebro, la energía EMS contrae las fibras musculares de la zona a intensidades inalcanzables durante el entrenamiento voluntario. El estrés extremo obliga al músculo a adaptarse, lo que resulta en un aumento en el número y crecimiento de fibras y células musculares. Estudios clínicos han demostrado un aumento promedio del 25 % en el volumen muscular.

Opiniones